Pepita

De manera franca y directa invito al espectador a silenciar ciertos clichés y juicios, ya sea en las acciones o en la forma de pensar. Sí, una mujer puede fumar, beber, salir, envejecer, engordar, llorar, gritar, pintar... Ser amante y madre. Hacemos lo que nos gusta, lo que nos motiva y ¡lástima que resulte molesto! Los temas principales que recorren mis pinturas se basan en una inversión de clichés y paradojas que animan la vida cotidiana de las mujeres. Quiero mostrar la complejidad de las relaciones que siempre se tejen a primera vista: juzgados, evaluados, comparados, criticados, hagamos lo que hagamos, el otro siempre capta nuestra imagen, que a veces se nos escapa.

SER MUJER ya es un nombre extraño de por sí, como si fuéramos extraños a nosotros mismos.

Pero ¿qué es Ser Mujer? Esto es lo que cuestiono y experimento en mis pinturas.