Luisa-Fernanda Debarnot

¿Puede la pintura ser un camino hacia la felicidad, al igual que el trabajo filosófico o espiritual?

En esta tradición se inscribe la obra de Luisa Fernanda Debarnot-Pineda.

Nacida en Colombia, estudió pintura y bellas artes en la Universidad de los Andes antes de realizar una formación en restauración y conservación de pintura en la Universidad Externado de Colombia.

Fue con esta sólida formación técnica que se embarcó en la pintura a principios de la década de 2000 en su país natal, Colombia.

Naturalmente, se inspira en las leyendas y personajes míticos de su tierra natal. Deidades de la naturaleza y la selva exuberante están presentes en sus primeras obras marcadas por colores densos y vivos, así como por un estilo formal característico de la Escuela de la “Secesión vienesa”.

Su obra fue entonces objeto de exposiciones en Bogotá en Colombia, Managua en Nicaragua, Miami y Dallas en Estados Unidos.

Poco a poco la línea se va liberando, los colores se vuelven más numerosos, más contrastados y luminosos, fijados por toques contrastantes, al igual que la introducción de hojas o flores secas así como fondos dorados, plateados o cobrizos en sus cuadros, hacen también un eco lejano de Las pinturas de Klimt.

Finalmente, la línea suelta y los temas representados vibran con los colores para ofrecer lienzos que reflejan los sentimientos íntimos de su autor: la línea de la felicidad ...