Presentación
Las pinturas de James Chiew han surgido gracias a su creatividad, perspicacia y habilidades organizativas. Los diseños son reconocibles, gráficos, a menudo con un tinte oriental. Una escultura o pintura de James Chiew tiene el don de llevar la atmósfera de toda la habitación al siguiente nivel. James Chiew, que es de Singapur, nunca se formó en arte o diseño. Gracias a su perspicacia y talento, se convirtió en fotógrafo y director de arte por su cuenta. En 2001, su agencia de diseño gráfico despegó. Como su hambre de expresión creativa aún no había sido satisfecha, comenzó a fotografiar en 2005. Adquirió experiencia en fotografía culinaria y de productos, entre otras cosas, antes de ampliar sus habilidades con sesiones de modelaje. Fue solo a partir de 2009 que su verdadera sangre de artista salió a la luz. Las imágenes o pinturas de James Chiew apelan a la imaginación a través de colores, formas y textos. No es ajeno a las exposiciones. "Si no está satisfecho con lo que ve, créelo usted mismo". El lema de Chiew es evidente en cada pintura o escultura de James Chiew. Chiew se inspira en objetos y actividades cotidianos. Cuando reconoce su fuente de inspiración, nunca mirará el mundo vuelve a ser el mismo. Chiew sabe cómo mostrar al espectador una perspectiva diferente con su ojo para los detalles, el color y la técnica. Una nueva mirada a lo que encontramos en nuestra vida diaria. Los tonos y, a veces, las imágenes atrevidas aportan emoción y sensación a el espacio. No es de extrañar que Chiew se haya hecho un nombre en las artes corporativas. Una escultura de James Chiew o una pintura de James Chiew te separan de la realidad.